Las estrellas se forman a partir de concentraciones en gigantescas nubes de
gases. Estas se contraen debido a su propia atracción gravitatoria. A medida que
la nube se encoge, pierde parte de la energía almacenada en ella como energía
potencial gravitatoria. Ésta es convertida en calor, que en los primeros tiempos
de la estrella embrionaria puede escapar fácilmente, y así la nube de gas
permanece fría. Al aumentar la densidad de la nube, se hace más difícil la
salida para el calor, y así el centro se calienta. Si la nube es lo
suficientemente grande, el aumento de la temperatura es suficiente para que
ocurran reacciones nucleares. Esto genera más calor, y la ocurre la 'combustión'
de hidrogeno en helio, como en el Sol. Desde ese momento el objeto es una
estrella.
Hace unos pocos meses el telescopio espacial Hubble pudo captar imágenes de un
par cúmulos de estrellas que se encuentran a unos 25,000 años luz de distancia
del Sol, en la dirección del centro de nuestra galaxia. Estos cúmulos están
localizados a menos de cien años luz del centro de la Galaxia y son notables por
varias razones. Una de ellas, es que son diez veces mayores que los cúmulos
normales y de hecho se les describe como gigantes. Otra, es que muestran un gran
número de estrellas jóvenes y muy masivas y ofrecen la oportunidad de estudiar
cómo se pueden formar cúmulos de esas dimensiones.
¿Qué es un cúmulo?
Los
cúmulos globulares son agrupaciones densas de centenares de miles o
millones de estrellas viejas (más de mil millones de años), mientras que
los cúmulos abiertos contienen contienen generalmente centenares o
millares de estrellas jóvenes (menos de cien millones de años) o de edad
intermedia (entre cien millones y mil millones de años).
Qué son las estrellas fugaces?
Las estrellas fugaces son pequeñas partículas que al entrar a gran velocidad en la atmósfera de la tierra, se queman
y producen el trazo luminoso que surca rapidamente el cielo y que llamamos estrella fugaz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario